23 Nov ¿Por qué procrastinamos?
Todos en algún momento hemos tenido algún proyecto, tarea o actividad que sabemos que es importante para nosotros, pero que por alguna razón no somos capaces ni siquiera de comenzar y si por algún milagro logramos comenzarla, nos cuesta mucho terminarla.
¿Alguna vez en tu vida has dicho frases como: “Mañana comienzo”, “Hoy no es un buen día”, “No me siento inspirado en este momento”, “Primero voy a descansar un poco y después comienzo con toda la energía”, “Organizo todo primero y después hago esto”, “¿Un capítulo más de la serie y ya me voy a trabajar?”
Si alguna de estas preguntas te suena familiar, ¡Bienvenido al club de los procrastinadores!
Todos los que hemos procrastinado, no decidimos simplemente hacerlo, sin embargo, estas frases son un reflejo de algo que sucede dentro de nosotros cada vez que pensamos en dicha actividad que sabemos que necesitamos hacer, pero que no queremos.
¿Por qué hacemos esto?
Muchas personas afirman, que esto se debe a que nosotros no somos capaces de manejar nuestro tiempo correctamente y por eso siempre dejamos las cosas para último momento, lo cual no es en realidad correcto.
El procrastinador no es simplemente una persona que no sabe manejar su tiempo sino una persona que no sabe manejar sus emociones. Es difícil de creer a primera vista, pero son nuestros miedos, limitaciones y creencias limitantes respecto a nosotros mismos y al mundo que nos rodean lo que nos impiden tomar acciones que nos lleven a culminar las tareas que sabemos que nos llevarán a un resultado específico.
Si en verdad queremos romper con este proceso, necesitamos entender en primera instancia, qué es realmente la procrastinación, de tal manera que logremos identificar cuáles son los factores personales que nos están llevando a procrastinar y a dejar de lado lo que consideramos importante para nuestra vida.
Teniendo esto claro, nos enfocaremos en crear hábitos que nos permita culminar nuestras tareas más fácilmente y ser más productivos en cada una de las áreas de nuestra vida en las cuales nos hemos fijado una meta concreta.
Irónicamente, aquellos que desean dejar de procrastinar, procrastinan el proceso de buscar entender qué es aquello que los lleva a no tomar acciones. Es mucho más fácil ignorar el problema y seguir de la manera que vamos, convenciéndonos que existe un momento mágico en el futuro donde si haremos lo que decimos que vamos a hacer.
Sólo aquellos que se toman el tiempo de reflexionar y trabajar en sí mismos logran vencer la procrastinación, ya que ellos encuentran las herramientas correctas que les permiten avanzar sabiendo perfectamente cuáles son las emociones, miedos y limitaciones que necesitan trabajar para así moverse hacia adelante, tomando acciones concretas en cada paso del camino.
Las personas exitosas que seguimos y que admiramos han logrado el éxito no por tener una inteligencia superior sino porque han encontrado en ellos mismos una dedicación plena entendiendo cuando funcionan bien y cuando no.
Porque no se trata de trabajar mucho sino de trabajar eficientemente, inteligentemente y esto lo logramos todos los seres humanos cuando nos damos la oportunidad de identificar tanto nuestras habilidades como nuestras capacidades y nuestras debilidades. A partir de ahí nosotros podemos crear las mejores estrategias para obtener aquello que queremos.
Si tú deseas liberarte de la procrastinación, si honestamente quieres lograr aquello que anhelas para tu vida es cuestión simplemente de que comiences a trabajar en tus emociones. Olvídate por un momento de planear todo, de poner todo en un montón de agendas y calendarios que a la larga no vas a leer; si quieres romper el círculo vicioso, date el tiempo de conocerte a ti mismo y ahí vas a encontrar la respuesta.
Te invito a que te des la oportunidad de liberarte de la procrastinación de una vez por todas. Si quieres saber como has clic aqui
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